La ansiedad es una emoción caracterizada por sentimientos de tensión, pensamientos preocupantes y cambios físicos, como el aumento de la presión arterial.
Las personas con trastornos de ansiedad generalmente tienen pensamientos o preocupaciones intrusivas recurrentes. Pueden evitar ciertas situaciones por esa preocupación. También pueden tener síntomas físicos como sudoración, temblores, mareos o latidos cardíacos rápidos.
La ansiedad, la preocupación y el estrés forman parte de la vida cotidiana de la mayoría de las personas. Pero simplemente experimentar ansiedad o estrés en sí mismo no significa que necesites ayuda profesional o que tengas un trastorno de ansiedad. De hecho, la ansiedad es una señal de advertencia importante y a veces necesaria en una situación peligrosa o difícil. Sin ansiedad, no tendríamos manera de anticipar las dificultades y prepararnos para ellas.
La ansiedad se
convierte en un trastorno cuando los síntomas se vuelven crónicos e interfieren
con nuestra vida diaria y nuestra capacidad para funcionar. Las personas que
sufren de ansiedad crónica generalizada a menudo presentan los siguientes
síntomas:
- Tensión muscular
- Debilidad física
- Mala memoria
- Manos sudorosas
- Miedo o confusión
- Incapacidad para relajarse
- Preocupación constante
- Falta de aliento
- Palpitaciones
- Malestar estomacal
- Baja concentración
Cuando estos síntomas son graves y lo suficientemente molestos como para que las personas se sientan extremadamente incómodas, fuera de control o indefensas, generalmente es un signo de un trastorno de ansiedad.
Los trastornos de ansiedad caen en un conjunto de diagnósticos distintos, dependiendo de los síntomas y la gravedad de la ansiedad que experimenta la persona. Los trastornos de ansiedad comparten la anticipación de una amenaza futura, pero difieren en los tipos de situaciones u objetos que inducen el miedo o la conducta de evitación. Diferentes tipos de trastornos de ansiedad también tienen diferentes tipos de pensamientos no saludables asociados con ellos.
Los trastornos de ansiedad son los trastornos mentales más comúnmente diagnosticados en México. El tipo más común de trastorno de ansiedad se llama «fobias simples», que incluye fobias a cosas como arañas, serpientes o estar en un lugar alto. Hasta un 9 por ciento de la población podría ser diagnosticada con este trastorno en un año determinado. También son comunes el trastorno de ansiedad social (fobia social, alrededor del 7 por ciento), tener miedo y evitar situaciones sociales, y el trastorno de ansiedad generalizada (alrededor del 3 por ciento).
Los trastornos de ansiedad se tratan fácilmente mediante una combinación de psicoterapia y, en caso de ser necesario, medicamentos contra la ansiedad. Muchas personas que toman medicamentos para los trastornos de ansiedad pueden tomarlos según sea necesario, para la situación específica que causa la reacción de ansiedad.
Síntomas
La mayoría de las personas han experimentado síntomas fugaces asociados con trastornos de ansiedad en algún momento de su vida. Tales sentimientos, como tener dificultad para respirar, sentir el latido de su corazón sin razón aparente, experimentar mareos o visión de túnel, generalmente pasan tan rápido como vienen y no regresan fácilmente. Pero cuando regresan una y otra vez, eso puede ser una señal de que los sentimientos fugaces de ansiedad se han convertido en un trastorno de ansiedad.
Los tipos principales de trastornos de ansiedad incluyen:
- Trastorno de Ansiedad Generalizada
- Trastorno de Pánico
- Trastorno Obsesivo-Compulsivo
- Trastorno por Estrés Post Traumático
- Fobia Social
- Agorafobia
- Fobia Específica
Causas y Diagnóstico
La ansiedad puede ser causada por numerosos factores, que van desde estímulos externos, abandono emocional, vergüenza, hasta experimentar una reacción extrema cuando se exponen por primera vez a algo que puede provocar ansiedad. La investigación aún no ha explicado por qué algunas personas experimentan un ataque de pánico o desarrollan una fobia, mientras que otras que crecen en la misma familia y experiencias compartidas no lo hacen. Es probable que los trastornos de ansiedad, como todas las enfermedades mentales, sean causados por una combinación compleja de factores que aún no se comprenden completamente. Es probable que estos factores incluyan el desarrollo infantil, la genética, la neurobiología, los factores psicológicos, el desarrollo de la personalidad y las señales sociales y ambientales.
Como la mayoría de los trastornos mentales, los trastornos de ansiedad son mejor diagnosticados por un profesional de salud mental: un especialista que está capacitado en los matices de los diagnósticos de trastornos mentales (como un psicólogo o psiquiatra).
Tratamiento
El tratamiento de la ansiedad se centra en un enfoque doble para la mayoría de las personas, que se centra en el uso de psicoterapia combinada con el uso ocasional de medicamentos contra la ansiedad según sea necesario. La mayoría de los tipos de ansiedad pueden tratarse con éxito solo con psicoterapia; las técnicas cognitivo-conductuales y conductuales han demostrado ser muy eficaces. Los medicamentos contra la ansiedad tienden a ser de acción rápida y tienen una vida corta, lo que significa que abandonan el sistema de una persona con bastante rapidez (en comparación con otros medicamentos psiquiátricos, que pueden tardar semanas o incluso meses en abandonarse por completo).
Referencias:
American Psychiatric Association. (2013)
American Psychological Association (2018)
Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, (5th ed.). Washington, DC
